sábado, 12 de septiembre de 2020

Las primeras iglesias catedrales en América


                                                                  Catedral de Oaxaca (*)
En el siglo XVI se comenzaron a construir las primeras iglesias catedrales en América, particularmente en Nueva España. Eran muy sencillas y con materiales deleznables, como adobe, paja y madera, por lo que cumplieron una función provisional antes de que las diócesis se dotasen de otros templos hechos con piedra.

Huejotzingo, por ejemplo, en el sur de México y rodeado de las últimas estribaciones montañosas que ocupan México de norte a sur, contó con dos templos de un convento, aunque la monarquía española se ocupó del nombramiento de obispos, en primer lugar, en las islas del Caribe.

En Tlaxcala, no lejos de Huejotzingo, se estableció una diócesis en 1519, y luego otras en Yucatán, Michoacán, México, Oaxaca, Guadalajara, Chiapas, etc. Todas tuvieron iglesias catedrales que se construyeron provisionalmente, mientras no era posible erigir templos más sólidos, solemnes y de fábricas más permanentes, lo que ocurrió a partir de la segunda mitad del siglo XVI.

Las órdenes mendicantes, sobre todo los franciscanos y dominicos, estaban muy implantadas en Nueva España, por lo que en ocasiones fueron los sencillos templos de estas órdenes los que sirvieron de catedrales provisionales para los respectivos obispados. Según Enrique Camacho Cárdenas[i] los modelos arquitectónicos que se llevaron a cabo en el siglo del que estamos hablando respondieron a tipologías eclesiásticas andaluzas, con tres naves y carpintería mudéjar[ii].

En Tlaxcala se aprovechó un templo preexistente para la primera catedral, mientras que en otras sedes las primeras iglesias catedrales se realizaron con rapidez, aunque luego se retrasase tanto la construcción de las definitivas que permanecieron un largo tiempo de vigencia. En Valladolid, hoy Morelia, los materiales del primitivo templo sirvieron para reaprovecharlos en el definitivo, y otro tanto podemos decir de Guadalajara. En otras ocasiones esto no fue posible porque los materiales de la primitiva sede episcopal eran adobe y paja.

La provisional de Puebla –dice Camacho Cárdenas- tuvo sucesivas reparaciones, pero en 1561 se encontraba muy deteriorada. No obstante su sencillez, se tendió a que estas iglesias tuviesen tres plantas, aunque se cubrieran de forma adintelada y con madera. La provisional de México fue realizada por Martín de Sepúlveda, que era maestro de obras de la ciudad, pero no fue terminada por él[iii], y allí se instaló el franciscano Juan de Zumárraga, primer obispo de México[iv]. El emplazamiento de éste templo es el mismo que el que ahora ocupa el atrio de la catedral. Hacia finales del siglo XVI fue restaurada y ampliada, con tres naves pero techumbre de madera.

Otros fueron los avatares de la catedral de Oaxaca, que sufrió permanentes destrucciones y reconstrucciones a causa de terremotos, siendo la fábrica actual del siglo XVIII. El obispado de Michoacán, creado en 1536, estableció su sede en Tzintzuntzan (en el oeste de México pero no en la costa), siendo empleada para primera catedral la iglesia de los francisanos, pero luego se trasladó la sede al barrio de Pátzcuaro, que hoy es municipio independiente, y en 1574 se donó el edificio a los jesuitas, mientras que la catedral definitiva, iniciada en la década de 1540, constaría de cinco naves, pero como se realizó muy rápidamente, a los pocos años presentaba un estado ruinoso.

[i] “Las catedrales provisionales en Nueva España…”.
[ii] R. López Guzmán ha estudiado el mudejarismo en Iberoamérica coordinando una obra con otros investigadores.
[iii] www.catedralmetropolitanademexico
[iv] Nacido en 1468, fue el fundador de la Universidad Pontificia de México, y falleció en 1548.
(*) wikipedia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario