jueves, 12 de noviembre de 2020

Derrota en los Gelves


La isla de los Gelves se encuentra al suroeste de Malta, en el golfo de Caps, tan próxima a la costa de Trípoli como a la boca del río Tritón[i] –dice Cesáreo Fernández Duro[ii]- . En extensión mide la isla unos 40 km. de largo por 26 de anchura, abundando en el siglo XVI en olivos y palmares, cuyos frutos mantenían a la población repartida en aldeas y alquerías, supliendo con pozos la carencia de ríos y fuentes de agua potable.

Siempre fue éste rincón –sigue el autor citado- nido de piratas, como Malta, Sicilia y Cerdeña. El Almirante de Aragón, Roger de Lauria[iii], había castigado los latrocinios de aquellos desembarcando en 1284. Mucho más tarde pensó el rey don Fernando el Católico reprimirlos de nuevo, y esto lo llevó a cabo el Gran Capitán, pues en 1501 no le estorbaban las guerras de Italia.

Años después se organizó la expedición del conde Pedro Navarro[iv] en 1510, quedando sometido Trípoli, saliendo de Málaga una segunda armada a las órdenes de don García de Toledo, padre del duque de Alba y sobrino del rey Católico, ocupando los Gelves con no menos de 16.000 infantes, sin contar la gente marinera . Se empezó la marcha hacia el interior con el ardor del sol, el peso de las armas y, sobre todo, la falta de agua. Unos cuantos moros a caballo, aprovechando que la tropa estaba combatiendo su sed en una arboleda con pozos, sembraron el pánico y en vano quiso alentar a los suyos don García de Toledo.

El resultado fue espantoso: con don García sucumbieron 60 capitanes, calculándose en 4.000[v] los hombres muertos o cautivos, mientras en la costa se perdieron cuatro naos con toda la gente embarcada, y en una isla inmediata, la gente sorprendida y acobardada fue acuchillada por un número inferior de moros.

Diez años después volvió a los Gelves don Hugo de Moncada[vi], virrey de Sicilia, con otra armada de cien velas, 13.500 infantes y 1.000 caballos; los puso en tierra a mediados de 1520 y, no llanamente abriéndose paso, el escuadrón que personalmente guiaba arrolló a los moros, otro de los suyos cejó viéndose en aprieto, pero con todo pidió la paz el jeque de la isla reconociéndose sometido.

Se dijo entonces en España que los Gelves eran malos de ganar, y aún quedaba lo peor en 1560. La expedición que se preparó contó con 3,6 millones de raciones para 30.000 hombres entre españoles, alemanes, italianos, franceses, griegos, sicilianos y 100 caballos. La armada estuvo formada por más de 100 velas entre galeras, galeotes y galeones, naves gruesas, escorchapines[vii], bergantines y fragatas. Pero antes del combate aún tuvieron los capitanes que vencer otros contratiempos, como la sublevación de la compañía de don Lope de Figueroa, formada por bandidos de Sicilia. Estos dieron muerte al sargento, saquearon la carga y pusieron fuego al resto, por lo que algunos tuvieron que escapar a tierra.

Otro tanto quiso hacer la compañía de Vicente Castañola, también de sicilianos, pero el general mandó ahorcar a tres de los culpables, otros perdieron las orejas y fueron sentenciados a galeras los demás. Esto llevó a pensar –al menos por parte de algunos- que la empresa no era ya de provecho, pues entraba el invierno y las tripulaciones se veían mermadas por el hambre y la muerte. Los 8.000 hombres, y no sanos, no arredraron a Juan Andrea Doria[viii], que siguió con las operaciones hasta enfrentarse a los turcos e Pialí Bajá[ix] en mayo de 1560, siendo el resultado favorable a los otomanos, que estaban en el momento de máxima expansión en el Mediterráneo.

El desastre para la armada española fue enorme, además de que algunas de las naves fueron capturadas por los turcos, no poniéndose de acuerdo los historiadores en el número de bajas, que oscilan en torno 14.000[x]. Un empeño contra el islam en la Edad Moderna, por el poder en el Mediterráneo entre dos mundos comandados por personas de mucha ambición, aunque no todas con valor.

Faltaban más de once años para que en Lepanto los ejércitos cristianos vengasen la derrota en los Gelves, ambas, muestras del esfuerzo de guerra en un siglo tránsito entre lo antiguo y lo moderno.


[i] En la costa sureste de Túnez hoy.

[ii] Zamorano nacido en 1830 y fallecido en 1908.

[iii] Calabrés nacido en 1245 y fallecido en Cocentaina (norte de la actual provincia de Alicante) en 1305, estuvo al servicio de la Corona de Aragón.

[iv] Navarro fallecido en Nápoles en 1528, participó en las guerras de Italia y en el norte de África, pero siempre con el mejor postor.

[v] Estas cifras deben tomarse con precaución, probablemente son exageradas, pues el autor no cita fuentes.

[vi] Natural de Chiva (Valencia), murió en 1528, habiendo participado en las guerras de Italia y del norte de África, también a favor de varios estados.

[vii] Una embarcación de guerra más.

[viii] Genovés que también intervino en la batalla de Lepanto.

[ix] Comandante otomano y luego visir.

[x] Ver lo dicho en la nota v.


No hay comentarios:

Publicar un comentario