Aparcadero, de Arman |
Como la noción de arte está
puesta en tela de juicio, de forma que hace ya tiempo que los límites
convencionales del mismo se han roto, cabe preguntarse si hay nuevos límites o
estos son ilimitados, ya que nuevas generaciones de artistas, nuevos tiempos
con sus estímulos y condicionantes, pueden alumbrar emociones, visiones,
sentido de la estética, formas de comunicar, etc. distintos.
Ni siquiera sabemos que llevó al
hombre primitivo a realizar las primeras obra que, mucho más tarde, llamamos
arte. Es poco probable que aquellos seres que esculpieron las pequeñas
"venus" solutrenses quisiesen pasar el rato o llenar su ocio. Es
también poco probable que tuviesen un sentido de la estética definido, aunque
alguno tendrían, pues distinguirían lo agradable a la vista, al tacto... de lo
que no lo era. Quizá, como se ha dicho muchas veces, tuvieron intenciones
mágicas en relación con sus supersticiones y creencias religiosas, o como ha
señalado Leroy Gourhan las obras de arte de los primitivos hay que analizarlas
en el conjunto del que forman parte y de acuerdo con ciertos presupuestos
freudianos; quizá también las figurillas o las pinturas tuvieron alguna
intencionalidad propiciatoria. Lo cierto es que el arte primitivo ha dado
ocasión a toda una historiografía, filosofía del arte y ha inspirado a artistas
de tiempos muy posteriores.
El escultor y pintor Arman tiene
una obra muy variada, de forma que lo podemos ver clasificado en muchas corrientes
artísticas de vanguardia, rompedoras de los límites del arte tal y como se
tuvieron hasta el siglo XX. También se rompieron otros límites en el siglo XIX
y puede que fuese la "edad técnica" la que condicionó todo. Es
evidente que uno de los objetivos de Arman es sorprender: toda sorpresa tiene
que venir de una novedad con la suficiente carga como para cumplir su objetivo.
Los impresionistas sorprendieron en su momento; luego los fauves, los
cubistas y así sucesivamente. Los practicantes del land art también nos
sorprenden con sus obras y Armand lo intentó en cada momento con sus
"cubos de basura", más máquinas y los ensamblajes que otros
intentaron antes.
Habrá quien diga que la obra de
arriba "no es arte", pero lo cierto es que lo será en la medida en
que se consagre como inspiradora de una tendencia en el futuro, un futuro que
ya es presente para el caso de Arman. Toda obra "de arte" no podrá
ser tenida por tal hasta que se consagra, y solo se consagra cuando el tiempo
no la ha dejado fuera del campo del arte.
Muy bueno
ResponderEliminar