sábado, 26 de noviembre de 2011

La formación del pueblo griego


A. Jardé, en el año 1960, publicó un libro cuyo título figura arriba, que no parece haya sido superado en sus ideas fundamentales. Las primitivas familias aristocráticas de Ática siempre habían defendido su origen mesenio cuando Mesenia caería bajo la dominación de Esparta. La oposición entre Atenas y Esparta, que no existió siempre, tuvo su origen, sin embargo, no en los diferentes regímenes políticos de los que se dotaron, sino en que aquellos atenienses que se convirtieron en la clase dirigente de la primera Atenas veían a Esparta como la opresora de sus hermanos mesenios. Por lo que respecta al resto de la población ateniense, era mixta en grado sumo. 

La aglomeración rural (komé), nacida en torno a las posesiones del "genos", es un pequeño estado-aldea, antes de que tenga lugar el fenómeno de las pólis; sin embargo, las aldeas o komé continuaron siendo habitadas como en el pasado, pero dejaron de ser estados; los pritaneos locales en los que ardía el fuego sagrado de la aldea (las primeras agrupaciones tenían una base religiosa) fueron reemplazados por un pritaneo único.

Los que las fuentes antiguas llaman pelasgos -los prehelénicos- hablaban sin embargo una lengua helénica y los monumentos micénicos de Ática son una evidencia del aquel origen mesenio. En un primer momento los grandes propietarios que se fueron formando se asentaron en la llanura ática: son los eupátridas o pedienos que enseguida configuraron la nobleza, dueños de las mejores tierras. Fuera del llano habitaba una población heterogénea e inferior: los thetas o diacrianos. Los paralios se pueden equiparar a los comerciantes y navegantes.

Originariamente cada ciudad tenía sus dioses y a los que participaban en el culto se les reconocía como ciudadanos: religión y patriotismo es una misma cosa, por lo que no nos debe extrañar esta constante en otros momentos de la historia muy posteriores, dentro y fuera de Grecia. En época clásica los dioses tendieron a dejar de ser locales y se convirtieron en panhelénicos, acomodados a las necesidades de cada grupo de ciudades en los que se veneran. En un plano inferior están los héroes, pero no existió en la religión griega ningún dogma enseñado por ningua jerarquía eclesiástica e impuesto a los fieles. Llegó el momento en que no se concibió ninguna agrupación, desde la familia a la liga de las ciudades, sin un culto común.

Desde el punto de vista administrativo las divisiones más antiguas son las naucrarias, sobre las que gobernaba un rey que era a su vez, sacerdote, juez y jefe militar. Los eupátridas, por su parte, terminaron formando un consejo y un tribunal de justicia. Desde la segunda mitad del siglo VIII antes de Cristo nueve arcontes gobernaron Atenas (generalmente durante un año), mientras el areópago administraba justicia, y un paso intermedio hacia la democracia fue el acceso de los paralios al gobierno de la ciudad junto con los eupátridas. 

Solón reemplazó los derechos del linaje por los derechos de la riqueza, lo que llevó (entre outras causas) a que Pisístrato, con el apoyo de los diacrios, imponga una tiranía: se trataba de realizar reformas radicales. Pero el comienzo de la explotación de las minas de plata de Laurión modificó las condiciones materiales y el enriquecimiento dio al traste con el régimen de tiranía, pero también propició el ataque de los paralios. No obstante, cuando el alejamiento del pasado idealice a los personajes y a los acontecimientos, la época de Pisístrato se reconocerá como la edad de oro. 


El siguiente gran legislador fue Clístenes, que establece una circunscripción territorial a base de "demos"; varios demos constituían una "trittya" y tres trittyas una tribu. Desde Clístenes, cada tribu está formada por trittyas urbanas, costeras y del interior, lo que consigue diluir a los "genos". Todo ello no hace cesar la conflictividad social, por lo que tras el régimen oligárquico y tiránico se llegará a la democracia, que se transformará con Pericles en la segunda mitad del siglo V antes de Cristo. No entrando aquí en consideraciones sobre la naturaleza de la democracia ateniense, diremos tan solo que un ciudadano obedecía a las leyes, mientras que un bárbaro o esclavo obedece a un amo.

En el orden exterior se había ido produciendo, desde el siglo VIII antes de Cristo, la expansión por la cuenca oriental del Mediterráneo, lo que no es cosa exclusiva de los atenienes; muy al contrario, estos van con retraso respecto de las ciudades jonias. Más tarde se coloniza Calcidia y Tracia, que se incorporan a la cultura griega, aunque los tracios no estarán helenizados hasta el siglo IV antes de Cristo. Bizancio, por su parte, fue fundada dos siglos antes. Una colonia griega ya existía en Egipto en el siglo VIII, por lo que no es extraño ver a griegos enrolados en el ejército egipcio contra Asiria, como antes habían formado parte de los ejércitos hititas y libios contra los faraones de las dinastías XIX y XX, y así es como empiezan a aparecer faraones filohelenos. 

Hacia 630 antes de Cristo ya hay colonias griegas en Libia, muy cerca de la fenicia Cartago. Siguiendo la costa africana y luego atlántica está documentada la llegada de griegos a Senegal, y siguiendo la costa atlántica europea los griegos llegan a los países septentrionales.

1 comentario:

  1. ...sin mitos, no hay dioses, sin dioses no hay religión, sin religión no hay ciudadanía, sin ciudadanía no hay pueblo... Grecia tenía como base su cosmovisión

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